La compra de un inmueble es algo que se debe analiza con todo cuidado, ya que intentamos obtener el mayor beneficio para nuestro estilo de vida y el de nuestras familias. Vemos ubicación, metros cuadrados, exteriores, terminados, amenidades, áreas comunes, accesos, etc., pero en realidad, ¿le prestamos la misma atención al precio y la forma de pago?

El sistema inmobiliario: construcción, desarrollo, créditos e inversiones, determinan el desarrollo económico de un lugar, ciudad, país y hasta el mundo, por lo que el desarrollo de esta actividad se considera, en primera instancia, el crecimiento general. Los créditos hipotecarios permiten la revolvencia en inversión de muchos lugares del mundo.

Antes de tomar un crédito, debemos minuciosamente ver lo más adecuado a nuestras necesidades, igual que escogemos la propiedad adecuada, debemos tener el financiamiento adecuado. Es lo más importante: ¿quién o quiénes se acreditan?, ¿cómo pagarlo?, ¿en qué tiempo?, ¿qué cantidad?, ¿cuándo prepagarlo?, ¡qué seguridad tengo?, entre otras cosas básicas. Hay un tipo de crédito para cada persona, así como hay una casa para cada quien.

Repasamos los puntos importantes:

Tipo de crédito. – si es de adquisición, de pago de pasivos, de liquidez, construcción o de varios a la vez. Cada producto tiene sus características que pueden adaptarse según el perfil de ingresos, enganche, calificación, tasa y conveniencia.

Plazo. – En forma general, en México tenemos hasta 20 años para un crédito hipotecario, pero se puede elegir el plazo entre 5 y 20. Es importante revisar la tabla de amortización donde se muestran los plazos para ver el cambio de la mensualidad, que eventualmente puede ser muy poca la diferencia entre plazos.

Tasa. – Pensamos que la tasa es lo más importante y nos dejamos llevar por el marketing de los diferentes bancos e instituciones, y pensamos que solamente la tasa más baja es lo más importante, pero se debe revisar el CAT (costo anual total) porque debemos tomar en consideración no solo la tasa publicada, pero la comisión de apertura, gastos administrativos, seguros y cualquier otro costo.

Condiciones generales. – La forma de pago si es directa desde una cuenta donde se va a tener facilidad de pago, pago electrónico, los seguros que cubran el saldo del crédito, la facilidad de prepago en cualquier tiempo de la deuda, etc.

Asesoría adecuada. – Así como tenemos una asesoría en la compra de una casa, en sus características adecuadas para nuestra forma de vida, es muy importante la forma de pago. Eventualmente nos vamos con la institución que nos autorice más “rápido” el crédito, pero hay que tomar en consideración que la velocidad no es lo más importante, es una deuda a largo plazo que debemos estudiar y ser asesorados para que finalicemos la transacción con la mejor opción.

Un crédito hipotecario es el más importante de los créditos para personas, porque nos permite cumplir un sueño de tener vivienda propia o de tener un inmueble para inversión, renta o sustento.

Un crédito hipotecario tiene la magia de cumplir un sueño.