Tomemos por ejemplo la historia de Airbnb, dos jóvenes estudiantes universitarios en la cuidad de San Francisco CA, quienes en 2007 vieron una oportunidad y decidieron comprar un par de colchones inflables y rentar el espacio extra de su departamento por medio de una plataforma digital. ¿Quién pensaría que estos dos jóvenes que no llegaban a fin de mes, ahora aparecen el la lista de Forbes?, sin duda, una buena lección para aprender.

Así fue como nació la plataforma líder en el mercado actual. Al día de hoy sus más de 4 millones de anfitriones ofrecen estancias fuera de lo común y experiencias únicas que permiten a los viajeros descubrir el mundo de una manera más auténtica y consciente. Es importante mencionar que buena parte del éxito han sido gracias a sus políticas. Por ejemplo, los anfitriones y huéspedes pueden estar tranquilos al saber que Airbnb ofrece cobertura de responsabilidad de seguros de protección de hasta 1 millón de dólares, además de que no penaliza ni limita a las propiedades enlistadas por aparecer en otras plataformas y fomenta la cooperación y la libre competencia por medio de las recomendaciones y el boca a boca.

Pero ¿Cómo funcionan estas plataformas tecnológicas? Muy sencillo, estas son similares a las del servicio de transporte, el anfitrión, pone a disposición su inmueble ya sea completo o parte de este a algún huésped potencial, para que este lo utilice por algún periodo de tiempo definido. Finalmente, el huésped paga por el servicio y el desarrollador de la plataforma digital cobra una parte de dicho servicio por haberla utilizado para la operación.

El uso de estas plataformas está creciendo a pasos acelerados superando y dejando en problemas al sector hotelero. Durante los periodos de aislamiento más severos de la pandemia, las familias mexicanas y las de otros países, buscaron frenéticamente poder salir del encierro y una muy buena alternativa a los hoteles multitudinarios era, sin duda, la renta de una casa, cabaña o hasta un castillo exclusivo por medio de una plataforma que les diera seguridad en su transacción.

Existen en el mercado varias opciones de plataformas que ofrecen este servicio, siendo las más usadas, booking.com, airbnb.com, entre otras. También existen páginas que enlistan sus exclusivos hospedajes para clientes que buscan algo más que una simple estancia en una casa de lujo con experiencias especiales como cena con un chef experto, paseos privados, viajes en jet o yate, entre otras atracciones. Un ejemplo de ello en Los Cabos es caboplatinum.com.

Si después de leer este artículo estas interesado en subir ese espacio extra de tu casa a alguna plataforma, hay varios puntos importantes que tener en cuenta:

1- De la vista nace el amor, así que una buena sesión de fotografías te ayudará a dar a conocer tu espacio.
2- Responde las dudas y preguntas. Conocer lo que tu anfitrión espera es fundamental para que la experiencia sea exitosa.
3- Las personas que rentan suelen buscar algo más personalizado y menos comercial. Siempre sé sincero, recuerda que tus huéspedes no conocen y sobre todo se paciente y abierto a correr el riesgo, ya que hay personas que no necesitan mas información y otros que por más que te esfuerces, no quedarán satisfechos.

Y si tu intención es rentar, se consciente que tu anfitrión no siempre es un experto, se paciente y sincero y recuerda que, quien se publica lo hace por la necesidad de un ingreso extra y sobre todo por el gusto de compartir. Mantén siempre la comunicación y al final de tu experiencia retroalimenta a tu anfitrión. Los puntos negativos que no afecten a terceros, coméntalos en privado, esto le permitirá tomar acción para futuros hospedajes y los positivos publícalos, un mal comentario puede arruinar hasta 10 comentarios buenos, afectando ingresos de terceros.

En resumen, este método de rentas ha venido a acercar a los huéspedes a experiencias diferentes, y a los anfitriones les ha permitido poder recibir ese extra necesario. Ambos ganan seguridad y confianza a través de una plataforma con un ambiente amigable y auténtico.